La tecnología en los autos, otorgando menos responsabilidades al conductor

La tecnología cada vez nos hace la vida más fácil e incluso nos quita algunas de las responsabilidades que antes teníamos, pero cuando hablamos de la tecnología que se encuentra en los coches, es cuando las responsabilidades toman más relevancia, pues ya no sólo se habla de la seguridad de los pasajeros, sino de los peatones también, así como la de los otros vehículos que circulan por las vías designadas para los autos.

Pero en un auto que casi se conduce sólo, ¿de quién es la responsabilidad cuando sucede un accidente?, esto es lo que se ha planteado el presidente de la Federación Internacional del Automovilismo Región I, Thomas Möller, quien asegura que mientras el auto no sea autónomo, la responsabilidad seguirá siendo de las personas, pues son las que pueden y tienen el deber de estar siempre alertas en los coches que cuentan, por ejemplo, con la conducción asistida, que al final sólo ayudan al conductor, y no al revés.

Vehículos autónomos, cada vez más comunes

Los coches autónomos llegaron para quedarse, pero mientras estos se encuentran haciendo pruebas o comenzando sus servicios en terrenos algo controlados, las reglas se siguen formulando alrededor de ellos, pues es aquí donde cambia el paradigma de la responsabilidad, ya que, si consideramos algunos modelos que seguro están a punto de llegar al mercado, modelos que no incluyen volante ni pedales, la responsabilidad de un accidente queda flotando en el aire, pues ni si quiera existen modelos de venta establecidos para este tipo de autos, que por el momento tienen modelos pero de servicios de transporte ejecutivo en algunas ciudades.

Se había hablado en su momento de sacar a la venta este tipo de autos, pero es aquí donde tampoco se sabe de quién sería la responsabilidad, si del desarrollador del software que hace al auto ser autónomo, de la automotriz o de la persona que compró el vehículo.

Sobre estas medidas que se están tomando, se siguen discutiendo mucho, pues además de los coches autónomos, los coches conectados e inteligentes también serán parte del día a día en no mucho tiempo, pues según proyecciones del director, se espera que sea en menos de 30 años la total integración de estos servicios, en donde la propiedad de los autos podría desaparecer para darle paso a más alternativas de transporte seguro y confiable.

Sobre la protección de datos, si bien se ha considerado un peligro justificado el otorgar datos hacia un sistema que se encargará de transportarnos, también es cierto que, en buenas manos, este sistema nos ayudaría a brindar experiencias más personalizadas a la hora de subirnos a un coche inteligente, ofreciéndonos una mayor comodidad desde el ajuste de los asientos, hasta el material multimedia del que podamos disponer durante nuestro recorrido dentro de uno de estos autos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *